La empresa española RepScan se encarga de limpiar la reputación de las mujeres, los niños y los jóvenes, principales víctimas del ciberacoso y el ciberbullying.
La madrileña Macarena López-Roberts, de 54 años de edad, es la vicepresidente de RepScan que ha logrado formar un escudo de protección tecnológica para los que se ven envueltos en escándalos provocados por fotos y vídeos comprometedores en las redes sociales y que dañan su imagen.
Se trata del botón rojo, una herramienta que se activa en el momento en que la solicita el afectado. “Supongamos que hay una foto o un video flotando en la red. El afectado nos llama y si nosotros lo detectamos también lo neutralizamos y lo eliminamos por internet en 24 horas”, explicó.
El ciberacoso es un fenómeno nuevo que se produce en las redes sociales desde el hostigamiento de la víctima y su exclusión social hasta la manipulación de datos para perjudicarla a través de internet. Sus herramientas pueden ser utilizadas tanto para acosar a los demás como para defenderlas como es el caso de RepScan.
En la lista de los acosos figura la sextorsión que consiste en chantajear a la víctima a cambio de no publicar o difundir fotos o vídeos de carácter sexual.
“Las relaciones amorosas que se contraen por internet muchas veces son captadas por profesionales de la sextorsión. Chantajean y consiguen dinero a las mujeres, les hacen fotos, manipulan los contenidos gracias a la inteligencia artificial”, agregó.
En el caso de ciberbullying también se utiliza para dañar a alguien mediante la publicación de fotografías almacenadas que son manipuladas, igual las grabaciones de audios o los fotomontajes, que incluyen la manipulación con inteligencia artificial.
En las redes abundan las fotografías y videos grabados y publicados sin consentimiento con la intención de chantajear o humillar, y amenazar a través de diversas plataformas o páginas web creadas para ridiculizar a la víctima.
El botón rojo se dispara cuando hay odiadores profesionales. Cuando se activa intervenimos para minimizar el daño a personas públicas como futbolistas, artistas, directores. Es un botón contra el acoso digital.
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