En Europa es cada vez más alarmante las cifras de contagios por enfermedades de transmisión sexual (ETS), un problema que afecta no sólo a grupos de particular riesgo, sino a la población general.
Al respecto, el Centro Europeo de Control de Enfermedades (ECDC) calificó de “preocupante” el aumento de casos como la gonorrea, la clamidia y el linfogranuloma venéreo.
Un comunicado indica que se ha identificado una tendencia de una década de crecientes índices de esas infecciones en Europa, a pesar de una caída durante la pandemia de Covid-19, probablemente por cambios en el acceso a test y el menor contacto social.
Se trata de infecciones serias que pueden provocar graves daños y que, además, no genera inmunidad el haberlas pasado, por lo que las reinfecciones son posibles y frecuentes. Tampoco existe la mutua exclusión entre ellas, ya que un mismo individuo puede tener más de una ETS al mismo tiempo.
Adicionalmente, existen preocupaciones concretas sobre la resistencia antimicrobiana en el contexto de esta enfermedad, en especial a dos antibióticos, la azitromicina y el ciprofloxacino.
El informe indica que los casos de clamidia también han aumentado desde 2011, salvo la caída de 2020 por la pandemia, con los índices más altos en mujeres jóvenes heterosexuales.
El incremento de casos de linfogranuloma venéreo presenta además retos “únicos” por las potenciales complicaciones de larga duración, resaltó el comunicado.
El ECDC instó a reforzar las medidas de prevención, como los tests o las intervenciones específicas para grupos de riesgo, y a monitorizar la resistencia antimicrobiana.
Fuente: EFE
