El famoso artista callejero conocido como Bordalo II instaló una alfombra con imágenes de billetes de 500 euros en un escenario de Lisboa para protestar contra la futura visita del papa Francisco a Portugal, según se aprecia en una publicación realizada el viernes de la semana pasada en su cuenta de Instagram.
«Paseo de la vergüenza. En un estado laico, en un momento en el que muchas personas luchan por mantener su hogar, su trabajo y su dignidad, se han invertido millones de fondos públicos para patrocinar la gira de la multinacional italiana. ‘Habemus pasta'», reza el texto escrito en portugués y en inglés.
El hombre y colaboradores suyos se disfrazaron de obreros e ingresaron al espacio restringido del Parque Tejo para llevar a cabo su acto reivindicativo en el lugar donde está previsto que el sumo pontífice hable durante la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ), que se celebrará del 1 al 6 de agosto en la capital lusa.
Polémica por denuncias de abusos sexuales
La organización de la presente edición de la JMJ ha estado marcada por varias polémicas, desde el coste del evento en sí, pasando por el indulto de penas hasta los supuestos intentos de «ocultar situaciones de pobreza», informan medios locales.
«Me parece perverso que después de conocer sobre abusos sexuales en la Iglesia, el Estado patrocine esta fiesta católica», explicó Bordalo II, de 35 años, en una entrevista concedida el sábado a la revista portuguesa Expresso.
No es la primera vez que el artista —conocido a nivel internacional por sus obras urbanas que dan vida a materiales desechados— critica a la Iglesia católica. El pasado mes de octubre presentó una pieza donde se veía a un bebé en una cruz con una corona de alambres, en referencia a los escándalos de abuso sexual vinculados con esa entidad religiosa.
Un encuentro para evangelizar
La JMJ es un encuentro mundial de jóvenes católicos con el Papa que se celebra cada tres años. La primera edición tuvo lugar en Roma, Italia, en 1986, encabezada por el Papa Juan Pablo II.
Según se lee en la página web oficial de la edición en Lisboa, “es, además, una peregrinación, una fiesta de la juventud, una expresión de la Iglesia universal y un fuerte momento de evangelización del mundo juvenil”. Además, se asegura que “a pesar de su identidad claramente católica, está abierta a todos, tanto a los más cercanos a la Iglesia, como a los más distanciados”.
En total se han celebrado ya 37 ediciones de JMJ (la de Lisboa será la número 38), habiendo pasado por países de Europa, América, Asia y Oceanía. Ninguna ha tenido lugar en África. Las últimas se habían celebrado en 2019 en Panamá.
El gobierno luso adelantó en enero de este año que gastaría 30 millones de euros en la celebración de la JMJ, una reducción frente a la cifra estimativa de 36,5 millones que se anunció el octubre de 2022.
(DL/Agencias)