Luisa González es oficialmente la candidata del movimiento Revolución Ciudadana (RC) para optar a la presidencia de Ecuador después de que el mandatario Guillermo Lasso decretara ‘muerte cruzada’ y disolviera a la Asamblea Nacional (AN).
Inicialmente, el sábado pasado había sido escogido el exvicepresidente Jorge Glas como el candidato, pero este declinó y propuso el binomio de González con Andrés Arauz —excandidato presidencial de RC en 2021— como aspirante a la vicepresidencia, en la convención del movimiento que se celebró en la ciudad de Portoviejo, provincia de Manabí. «Hay que cuidar el proyecto», dijo Glas.
Asimismo, la describió como una mujer «guerrera, valiente, compañera de lucha, profesional, militante, revolucionaria». Por su parte, González, tras ser designada y dirigirse a los simpatizantes de la RC, dijo que el objetivo de un eventual gobierno suyo es «recuperar la Patria».
«Vamos a ir hacia el país de la seguridad, de la paz y el bienestar (…) Ya lo hicimos y lo vamos a volver a hacer», enfatizó tras señalar que tiene «la fuerza, la capacidad y el valor» para esta misión.
González es la única mujer que aspira al primer puesto, dado que los 7 binomios restantes están encabezados por hombres y tienen a féminas como acompañantes de fórmula. Por disposición del Tribunal Contencioso Electoral (TCE) se aplica la paridad de género en las duplas, así como en las listas de asambleístas, ya que en agosto también se elegirán 137 parlamentarios.
Contempla la posibilidad de convocar una nueva Asamblea Constituyente, como hizo al inicio Rafael Correa, entre 2007 y 2008. Su objetivo sería «volver a poner la casa en orden» y no indultar a Correa, su principal asesor, aclaró.
Sobre esa posibilidad,hay que destacar que quien resulte electo en agosto tendrá un mandato corto, hasta mayo de 2025, cuando culmina el período que comenzaron en 2021 las autoridades cesadas con la ‘muerte cruzada’.
De ganar, Luisa González sería la primera mujer electa presidenta de Ecuador. El país ya tuvo una mandataria, pero apenas por 5 días, en 1997, cuando Rosalía Arteaga, entonces vicepresidenta, asumió tras la destitución de Abdalá Bucaram.
(DL/Agencias)
