Los virus son, gérmenes, cápsulas que contienen material genético en su interior y que son muy pequeños. Invaden las células vivas normales y las aprovechan para multiplicarse lo que acaba matando las células invadidas y puede provocar enfermedades, concretamente infecciones.
En cuanto a las características y diferencias de las enfermedades virales como la COVID-19, dengue, zika y chikungunya, y la forma de prevenirlas, el doctor Ruy Medina, exdirector del Hospital Central Universitario Antonio María Pineda de Barquisimeto (HCUAMP), explicó que dichas enfermedades son virales transmitidas por virus diferentes porque estos mutan y cambian.
“Son organismo constituidos por proteínas y entonces la estructura del virus se adapta al ambiente donde se está desarrollando”, explicó el especialista.
Precisó que, de acuerdo a la virulencia del virus, se van a producir diferencias en cuanto a la sintomatología pero todas dan fiebre, malestar general, dolor de garganta y tos seca.
Julio Castro, médico infectólogo, señala que, de acuerdo al reporte de la Organización Panamericana de la Salud (OPS), se destaca un aumento de casos de dengue, chikungunya, COVID-19 y zika.
El 90% de los casos en la región de estas enfermedades, corresponden al dengue, por lo que es el más preocupante en la actualidad.
Para identificar ante cuál de estas enfermedades se está, es necesario detectar los síntomas, pues en el caso del dengue el paciente presenta fiebre habitualmente más alta, dolores musculares, dolor retro ocular, puede complicarse con la fiebre y producir sangrado. Se previene fumigando.
La chikungunya se caracteriza por una fiebre alta, dolor de cabeza, articulaciones, manos, pies, rodillas y espalda. Se previene evitando pozos de agua.
El Zika produce una erupción cutánea, picazón, fiebre leve, conjuntivitis no purulenta y dolor de articulaciones. Se previene evitando picaduras de mosquitos.
Mientras que el COVID-19 genera dificultad para respirar, fatiga, dolores musculares y corporales, tos y cansancio. Se previene usando tapabocas y con el lavado de manos.
Fuente: El Impulso